domingo, 5 de diciembre de 2010

Quiero confesar

Estos días han sido diferentes, por no decir extraños, como que las circunstancias y el tiempo avanzan, pero a la vez se devuelve. Casi todo va muy rápido y sigo firme, bueno, mis rodillas son la excepción, me hacen temblar antes de dar un paso, pero fuera de eso, continuo.
Creo que algo ha estado transformándose para bien y eso me gusta, en especial con una persona valga la redundancia especial, hay más confianza de decir frases sin sentido lógico en plena libertad, también las miradas ahora son partes frecuentes, me agrada esta sensación de progreso. ¿Y a ti compañero, te agrada ?, se que falta más motivación de mi parte para ciertas cosas puntuales, pero como he abandonado el ejercicio diario, también se me esfumó aquella constancia por aparecer otras prioridades que no sirven de excusa, pero me encantaría volar contigo y hasta volver a volar yo misma con mis propias alas.
También debo decir, que me he echo de un vaso de agua, una marea incesante gracias a los análisis equívocos, pues claro, mientras uno piensa desde su postura el bien y el mal que provocará cierta actitud ejercida, terminamos carcomiendonos las ganas y la vida misma, por eso a seguir viviendo.
Este año ha sido complicado y aún no termina, pero tengo la alegría que termine un ciclo y que tengo a mi lado a personas alegres, que ríen y hacen sonreír a los demás. Extraño el uso de una nariz roja, de aquella máscara feliz que me hacia cambiar el color del día con una mueca, quiero volver, que la PSU sea pronto, para tener más tiempo para crear y amar con mis ex compañeritas.

No hay comentarios: